Maria Ahuad, Gustavo Brenta, Lucía Scotto di Carlo, Roxana Miguel y Zaida Mazzitelli |
En la sala de teatro acogedora que acompaña la propuesta gastronómica del restó Pan y Arte, se estrenó el viernes 13 de agosto la obra escrita por Claudia Piñeiro "Verona". Los protagonistas estuvieron rodeados de familiares, amigos y compañeros de teatro que reservaron sus butacas con mucha anticipación, ya que la compañía Media Hora anuncia en sus invitaciones que ya cuentan con dos funciones a sala llena a poco de abrir el telón.
La compañía teatral Media Hora conformada por un equipo de profesionales que se han destacado en distintos espectáculos artísticos. Esta vez se reúnen cuatro actores, Lucía Scotto di Carlo, María Ahuad, Roxana Miguel y Gustavo Brenta, todos estudiantes de la Escuela de Agustín Alezzo. El equipo está dirigido por Zaida Mazzitelli quien también preparó su carrera actoral con el mismo director.
Zaida Mazzitelli ya había participado en otra ocasión en el teatro Pan y Arte con la obra “Analfabetos”. Propuso volver a este espacio que tan bien la recibió para representar ésta vez la obra escrita por Claudia Piñeiro, Verona.
La puesta en escena es original ya que no utiliza demasiados elementos. Cuenta con el asesoramiento en iluminación de Claudio Del Bianco y en escenografía de Karina Maliauskas Sólo existirá lo necesario como para situar el conflicto en un baño de una casa donde se presenta una escena dramática que transcurre durante un cumpleaños. Para el sonido Gastón Miramón preparó cortinas musicales que no dejarán que el espectador se vaya de la escena, pero igualmente sepa que algo más transcurre atrás de la puerta.
Miramón además es el responsable de fotografía aunque también colaboró con la compañía en distintas etapas del proceso de armado de la obra.
La ambientación es la propicia para que el espectador nunca olvide que todo debe resolverse antes de salir de ese baño pero que la realidad de cada personaje nunca cambiará.
Me encanta!
ResponderEliminarA mi también me encantó! jaja
ResponderEliminarUna obra divertida y con resonancias. Y con un cuidadoso diseño, suficientemente despojado, como para inscribir el subtexto en la blanca pagina de un rollo de papel (higiénico).
ResponderEliminarUna obra digna y de calidad para un público amante del teatro mas que de los floripondios.
Enrique Montenegro